sábado, 8 de septiembre de 2018

Momentos

También la eternidad palidece con la llegada del momento. El tiempo del reloj da las horas, que segmentadas se hacen infinitas y eternamente abstractas, pero es el momento lo que origina que el tiempo dé las horas, y que ellas no terminen, como el sentido origina los lenguajes con sus traducciones. Momento de espera, de añoranza, de reencuentro, a la luz del cual todo lo demás se vuelve indiferente hasta casi desaparecer, como hacen los árboles y bosques para el corazón amante, siempre expectante.

Reflexión del 8 de septiembre

6 comentarios:

  1. Momentos ensombrecido por la conciencia de las horas.
    Preciosa entrada, David.

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  2. Como dicen los clásicos: el Instante es la Eternidad. O mejor, la eternidad es sólo el instante.

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  3. Jankélévitch y su presque rien de l´instant. Angelopoulos y su eternidad y un día. Tarkovski con su nostalgia y su secreta zona.
    Tus últimas reflexiones desnudan tu alma ante quien pueda contemplarla.

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  4. Así es, referencias que apuntan a lo mismo, y con ello, al alma humana.

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