viernes, 24 de mayo de 2019

Ramé. Reflexión de una joven filósofa.

Comparto con vosotros esta reflexión de una alumna de 1º de Bachillerato muy especial, Ahyssa Ramírez, prometedora filósofa. Su mirada, llena de sabiduría e ingenuidad, nos invita a ver la savia de las palabras, y su raíz, y sus hojas: "Deberíamos cuestionarnos e ir más allá de cada cosa nueva que aprendemos, saber que hay detrás de una palabra tan sencilla como ramé, y no seguir los cánones, sino romperlos e incluso fusionarlos."


Ramé




Algo que es hermoso y caótico al mismo tiempo.
La palabra “caos” tiene un significado más allá del desorden que nos podemos imaginar, es una palabra que te hace pensar, sentir.
¿Qué es el caos? Una respuesta obviamente muy personal, el interés de esta palabra es lo que nos puede hacer sentir.
Si cerramos los ojos y lo imaginamos, puedes sentir ansiedad, al imaginar algo tan desordenado, sin pies ni cabeza.
Pero también te puede parecer bonito e interesante, la belleza de lo complicado.
Asociamos al caos una connotación negativa que nos priva de encontrar la belleza a las cosas complicadas.
¿Por qué una sola palabra nos puede transmitir tanto? ¿El caos puede resultar bello?
De la misma manera que el caos mayormente causa un efecto negativo, la belleza produce el contrario.
Algo bello es algo digno de ver, de apreciar, cuando algo le parece bello a mucha gente y no encontramos esa belleza nos sentimos diferentes por no encajar; pero realmente, ¿qué es la belleza?
¿Por qué para la gente es bello lo que para mí no lo es?
¿Puede el caos ser algo bello?
¿Pueden convivir caos y belleza en un mismo elemento?
Y la belleza, ¿puede ser caótica?
El sentido a las palabras lo atribuimos nosotros, y lo que nos transmiten también. Que haya tanta variedad de pensamientos sólo refleja la complejidad de la mente humana, que a pesar de ser algo caótico, es hermoso.
Deberíamos cuestionarnos e ir más allá de cada cosa nueva que aprendemos, saber que hay detrás de una palabra tan sencilla como ramé, y no seguir los cánones, sino romperlos e incluso fusionarlos.
De alguna manera, siempre encontraremos la belleza que tanto gusta personalmente.

Ahyssa Ramírez