jueves, 30 de abril de 2020

Cómo ahogarse de una forma segura

Mientras los mares todavía escuchaban un capitán de barco navegaba rodeado de mapas, instrucciones y estadísticas. Aturdía a sus marineros con protocolos, cálculos y formularios, que pensaba, muy obstinado él, servirían a los suyos para afrontar cualquier adversidad del océano y sus criaturas. Era tanta la insistencia con la que instaba a los suyos a memorizarlos que estos, hartos ya de no practicar lo que más amaban, comenzaron a recelar del capitán. Algunos hablaban de motines, y otros, los más temerosos o cautos, preferían cumplir servilmente las órdenes de aquel. 

Pero llegó un día en que una fuerte tormenta se apoderó del barco y el mástil cayó partiendo en dos la nave. El caso es que, y aquí lo llamativo de la historia, mientras el capitán, muy obstinado él, y también muy ciego, continuaba instando a los marineros a memorizar pautas sobre cómo achicar el agua o preparar los botes salvavidas, y mientras los suyos seguían asintiendo o discutiendo sobre ellas, fueron todos llenándose de agua, y llenándose, hasta casi desaparecer...

Todavía se cuenta de un superviviente, que no sabía leer, que vio al capitán por última vez lamentándose de haber olvidado un manual que llevaba por título Cómo ahogarse de una forma segura.


8 comentarios:

Rocío dijo...

El manual lo he encontrado yo y me lo estoy estudiando. Luego haré él correspondiente informe que os pasaré junto a una tabla excel.

David Porcel Dieste dijo...

Muy bueno!

Anónimo dijo...

"Deja de parlotear, de encandilar con los mejores trajes de la ciudad, de dar lecciones de navegación mientra el barco se huhde" (W. H. AUDEN)

David Porcel Dieste dijo...

Muy apropiado.

M. A. Velasco León dijo...

Ocurrente y oportuno, sí señor.
Yo soy más pesimista,creo que hace años ya desde que el capitán fue abducido por un fondo de inversión de un paraiso fiscal y dicta las instrucciones a su segundo con el único fin de que el barco parezca desde fuera lo más mono y moderno posible.
Lo peor son buena parte de la marinería, ni siquiera cautos, ¡son fieles del absurdo!

David Porcel Dieste dijo...

Cierto, el origen es de raíces profundas y habría que excavar muy hondo para plantear nuevos escenarios. Gracias por pasearte. Un abrazo

Robin de los bosques dijo...

¡Muy bueno! Y ahí andamos, con el agua al cuello y tomando notas del manual.
El espectáculo debe continuar... La educación, ya veremos...

David Porcel Dieste dijo...

Muchas gracias querida Robin.