lunes, 6 de julio de 2009

Tiempo es lo que somos

Ojeando algunos poemillas que almaceno en el cajón de mis recuerdos he dado con éste que escribí hace tiempo sobre la fugacidad y la vanidad de las obras. Lo he escogido porque cierra una temática que ha estado presente en algunos de los últimos post. Con él además quiero despedirme hasta finales de Julio, cuando regreso de mis vacaciones donde desgraciadamente no tendré acceso a mi blog. Gracias por vuestro interés, vuestros comentarios siempre tan sabios y hasta la vuelta.

Tiempo es lo que somos
Tiempo que no vuelve

Palabra que el tiempo se lleva
Verso que alguien escucha

Vida entre una Nada
De la que no tengo recuerdo

Bendito verdugo del alma



Mayo 2006,

David Porcel

8 comentarios:

Diego Fernández Magdaleno dijo...

Felices vacaciones.
Abrazos,

Diego

David Porcel Dieste dijo...

Muchas gracias, Diego
Más abrazos,

David

Iacomus dijo...

Buen poema! Que descanses.

Jaume

David Porcel Dieste dijo...

Gracias Jaume, igualmente

Un abrazo

Mariana Soffer dijo...

Imagino que estaras esperando el verdugo despues de todo lo dicho en ese cuento/poema.

David Porcel Dieste dijo...

Y, sin embargo, nunca lo he esperado...

Saludos

Murmullo cucarachas dijo...

Vanidad en las obras!!!..
ergo...
EGO!!!!..

se cura con presion de alicates en los genitales!!!

para todo lo demas... tiempo!!!!

saludossssssssssss!!

Anónimo dijo...

Un poema rescatado es un poema radicalmente nuevo. Extraño a tí, te da una nueva luz.
Enhorabuena por el hallazgo, y a por más...
Miguel