Hace unos días el blog Antes de las cenizas (http://antesdelascenizas.blogspot.com/), que tanto interés y expectación despierta en sus lectores asiduos y ocasionales, nos agració con la entrega del Meme-Premio Limonada, gesto que nos satisface y le agradecemos profundamente.
jueves, 26 de marzo de 2009
Recibimos el Meme-Premio Limonada
Hace unos días el blog Antes de las cenizas (http://antesdelascenizas.blogspot.com/), que tanto interés y expectación despierta en sus lectores asiduos y ocasionales, nos agració con la entrega del Meme-Premio Limonada, gesto que nos satisface y le agradecemos profundamente.
jueves, 19 de marzo de 2009
Vuela, vuela, paloma de las lenguas
Vuela, vuela, paloma de las lenguas.
Ni la luz ni el aire podrá librarte
del encuentro con el trueno y con la arena
de la lengua cortada:
sabrás, así,
del silencio, de la noche y la ceniza,
pues carne serás del mismo fuego
donde arden los santos y las brujas
y las letras y sus dedos amados que las arman sin cese.
(Pascua de Pentecostés, 2004)
lunes, 16 de marzo de 2009
Poema de una alumna
La vida es preciosa
perfecta y bonita
como una rosa
Su pétalo, un beso
una mirada, un recuerdo
que desaparece como una lágrima al viento
Todo ha acabado
Un pétalo se desvanece
como si nada hubiera pasado
El aire se lo lleva
lo eleva
y desaparece
V.V.R. (Alumna de 2º E.S.O.)
martes, 10 de marzo de 2009
Palabras de un físico sobre la metafísica
miércoles, 4 de marzo de 2009
Más sobre el plan Bolonia
Al hilo de estas ideas, me viene a la mente una idea del ensayo recientemente publicado de José Antonio Marina La pasión del poder, muy recomendable para todo lector interesado en profundizar en la naturaleza del poder (lo tenéis en Anagrama), que hace referencia a la necesidad de pensar en una educación que prevenga al ciudadano de las estrategias de dominación del poder y le predisponga a ejercer plenamente su libertad:
Maquiavelo escribió: "Yo he enseñado a los príncipes a ser tiranos, pero también he enseñado al pueblo a destronar a los tiranos." Al estudiar cómo se configura el sujeto de poder, cuáles son sus mecanismos, recursos y estrategias, me interesa averiguar también cómo se pueden desactivar las estrategias de la dominación injusta. De la misma manera que hubo una copiosa literatura de manuales de educación del príncipe para ejercer el poder, necesitamos manuales de educación del ciudadano para ejercer la libertad. Y en uno de sus primeros capítulos habría que enseñarse a desenmascarar al poder, a deconstruir sus mitologías.
Volviendo al tema Bolonia, pienso que la implantación de dicho plan, si bien puede llegar a entorpecer la libre investigación, no podrá acabar con el ímpetu filosófico, de búsqueda de la verdad, consustancial al ser humano. Mientras sigamos siendo conscientes de nuestra ignorancia, de todo lo que nos falta por saber, seguiremos empeñados en buscar la verdad en las diferentes disciplinas del conocimiento. Me remito a mi experiencia como docente, que me confirma la existencia de alumnos más empeñados en comprender la teoría de la relatividad de Einstein o el método dialéctico de Platón que en pasar el tiempo ante el televisor, Internet o el Power-Point. Pero lo que no hay que olvidar es que la filosofía, diversificada también en las ciencias, debe ejercerse como una actividad libre y crítica, de forma creativa y creadora, alejada de imposiciones y determinaciones externas. No se aprende a filosofar, sino que se filosofa aprendiendo, aproximándonos a la verdad; y la educación, como también nos recordaba Ricardo Moreno en su ya célebre Planfleto antipedagógico, en primer lugar debe de potenciar nuestras capacidades y hacer incrementar nuestros conocimientos, porque sólo así, con los conocimientos previos adecuados y habiendo ejercitado nuestras facultades, podremos dedicarnos cuando sea menester a esa encomiable tarea que es la búsqueda de la verdad.
domingo, 1 de marzo de 2009
Cuando te vayas, recoge mi silencio
Cuídalo, y cuídate de él, pues ahí sigue al acecho mi dolor.
Acarícialo como se acaricia a un pájaro,
Y déjalo volar hasta que el aire sea sólo la luz que preña la montaña de hielo.
Allí tililará el silencio, liberado
En una soledad que nunca podrá ni ser soñada,
Y, ya en el centro, quieto, donde gravita la noche,
Irá dejando su aliento en el destino de las cosas leves
Que tus pies pisarán donde el destierro te lleve
Miguel Porcel Berdala,
Larués, 6 de diciembre de 2004